Aprendiendo

— Edit 3 —

Se lee mejor escuchando esta canción hehehe

[youtube lcOxhH8N3Bo]

Dicen que a la vida se viene a aprender. En otra perspectiva se dice que el conocimiento no es mas que el alma recordando lo que ya había olvidado. Esos griegos/romanos tan simpaticones. ¿Pero que si tenían razón?.

Siempre me he preguntado que viene uno al mundo a hacer. ¿Cuál es la meta que todos debemos de perseguir?. ¿La chuleta?. ¿Una gran mansión en las montañas nevadas de Aspen?. ¿Los secretos detrás de la vida, el universo y el todo?. ¿Los secretos detrás de las matemáticas?

Yo siempre he creído, una visión un tanto católica, que venimos a este mundo a no otra cosa sino sufrir. Posiblemente para en el futuro postmortem vivir una vida de felicidad y cosas bellas. Pero mientras, venimos a este mundo a vivir jodidos, sufriendo los embates del destino, las injurías de la sociedad, y las fatídicas consecuencias Sartrianas-Angustiosas de nuestras decisiones.

Claro, que mejor solución que morir. Pero como lo he expresado innumerables veces, el suicidio no es solución. Volveríamos a la gran sopa, para después renacer en el dolor. Bien lo dijo Platón, Sócrates, Schopenhauer, Nietzsche. ¿Quién soy yo para decirle no a esos señores (o al alcohol)?

Bueno, pero entrando en materia, dicen que uno nunca deja de aprender. Yo el día de ayer aprendí. Si, aprendí que no sé nada.

Todo comienza en un momento en que me solicitan ser de apoyo para alguien en sus deficiencias de conocimiento matemático a nivel escolar. Algo totalmente de rutina. La mamá me habla, me solicita clases, yo checo mi agenda, busco qué día y a qué hora puedo dar el apoyo, nos ponemos de acuerdo en un punto medio, expreso mí costo y quedamos. Completa y total rutina, nada fuera de lo normal.

Pero cuando uno asiste a dar la clase uno espera todo tipo de cosas. Una casa sucia, chamacos latosos, que cocinen todos los días con curry, que el papá sea un alcohólico y/o violento, etc. Uno se plantea miles de escenarios diferentes. Pero uno nunca piensa en que tu alumna te guste. Eso es taaaaan 1990 y las películas porno de Private Channel, que nadie lo piensa, nadie se lo imagina, nadie lo considera. O sea, es obvio que no sucede, mas que en los sueños calenturientos de jóvenes de 17 en sus cuartos, fantaseando que encontrarán a la chava mas buena de la tierra, se les lanzará como gato agazapado y les hará el amor con fervor y pasión. Eso NO pasa nunca en ningún lugar… Hasta que sucede… Y te sucede a tí…

¿Cómo llegue a esta situación? No lo sé. Pudo ser un Barbie Condechismo, o un Vaquismo, tal vez un poco de ambos. No lo sé. Pero pues cuando conoces a tu alumna, y te gusta, es el peor castigo que puede/debe soportar un profesor. Algunos lo hacen, otros fallan en el intento como cierto profesor de Filosofía. Es algo inhumano, sin embargo lógico. Si das clases a 20-30 alumnos por año, 3 o 4 grupos de ese tamaño, es lógico que en algún momento te encontrarás una persona que te agrade físicamente, somos humanos, y simplemente sucederá. Punto.

¿Qué se hace? Sencillo, alejarse de la tentación, intenta mantener uno la cabeza fría, serenidad ante todo, profesionalismo (sea lo que eso signifique). Mantener la calma, es la decisión difícil. Es como treparse a una montaña rusa, el conocerla y definir que te gusta físicamente, es la parte donde te suben a la  punta de la montaña para dejarte caer. Una vez arriba tiene uno que decidir si decide arriesgarse a todo el paseo, o bajarse del carrito.

¿Y dónde estoy yo? Pues bien mono sentado en el carrito, sintiendo como la cadena debajo de éste nos jala hasta la cima. ¡Que divertido! ¿Lo triste? Mientras más me acerco al final del camino menos tiempo tengo de elegir.

Ahora bien, ¿cuáles son mis opciones? Lo más difícil de los psicólogos, creo yo, es que tienen tantas teorías, tantos nombres, que pueden definir perfectamente la situación, pero no siempre tienen la solución al problema. Así pues yo tengo los nombres de la situación. ¿Pero y mi solución?.

Ella se planteó como un bien, hubo intercambio de conocimiento, pero en la inexperiencia, me brinqué los protocolos y pasé a la etapa de la cristalización. Sip, sin haber iniciado siquiera algún tipo de relación. No es mi culpa, siempre he creído que tengo corazón de condominio, pero por ello mismo, nunca intento nada con nadie. Y gracias a Yog, todos mis intentos de interacción social fallidos, han sido demostrados como que la persona en cuestión era más nefasta que yo ebrio. Y no sé por qué tengo la sensación que… ¡Deja vu!

OK, que pasó después. So pretexto del buen maestro y la preocupación (honesta de principio a fin), hubo intercambio de teléfonos. La tecnología de hoy en día permite la rápida comunicación por aplicaciones como WhatsApp. Y así es como comienza el declive de la situación.

Hubo intercambio de mensajes, un perfecto aprendizaje (pasó sus exámenes), etc. Pero invariablemente cuando a una víbora (yo) le das alas (ella), lo primero que intentan es volar y morder algo. Yo volé y ups, me caí. Quiero hacer notar claramente, que bajo ninguna circunstancia ha habido un intercambio físico de ningún tipo (besos, toqueteos, sexo, NADA), así que favor de no preguntar ni de pensar cosas que no son.

Ahora bien, ¿y a que viene toda esta maravillosa historia? Pues todo se resume a lo mismo siempre. ¿Cuál es mi meta?, ¿cuáles son mis expectativas?, etc. Invariablemente todo es una gran duda, siempre. Y lo peor de todo es que son un montón de deja vu acumulados a lo largo de mi historia psico-sexual.

Creo, que no soy su tipo, creo que no tiene interés en mí. Sin embargo nunca he sido bueno para el discernimiento de las indirectas y las „señales“ que luego mandan las señoritas. Simplemente a mi me tienes que decir „Es negro“ y ya, no „creo que está un poco oscurito“.

El día de ayer tuve una salida muy entretenida e ilustrativa con ella. Entretenida porque me sentí como hace mucho no. Es el problema de no ser sociable, cuando sales, todo es magia. Recorrimos Paseo Interlomas, después dimos la vuelta por Santa Fé, terminamos comiendo en „California Kitchen Pizza“ (no en el sushi como quería en un inicio. Supongo que al igual que el zapato de Cenicienta, la señorita con la que termine comiendo sushi será la elegida para pareja hehe) un lugar no tan glamoroso como lo tenía pensado, y al final ida al cine (sí, no pasó nada en el cine).

Ahora bien, pensando y recordando, esto me recuerda perfectamente bien a otra situación con otra señorita, bueno dos de hecho. La primera es más parecida. Así que empecemos con la segunda.

Era una señorita de mi escuela, me caía bien, y según tuve entendido después, tenía interés en mí. Así que un día la invité a un plan parecido, pero solo fuímos al cine (no pasó nada). Al terminar yo andaba de ocioso con un barquito de papel que hice, y estaba en mis debrayes exitencialistas cuando se me cayó. Hice el intento de recogerlo, ella me ganó, me lo entregó. Y al final de toda esa transacción, acercó su mano a la mía (y aplicó la clásica conmigo) „Oye que suavecitas tienes las manos, ¿usas crema?“. Ya aprendí que sí tengo las manos suavecitas, pero también ya me contaron que si me lo dicen entre dos (ella y yo nada más) es una frase de semi-ligue. Obvio no entendí en ese momento, me la pasé desvariando de n miles de cosas y eventualmente se tuvo que ir.

También aprendí después, que si se acerca a tí, puede ser que esté interesada en la conversación, pero si adicionalmente está tocando/acariciando tu/s mano/s, no está interesada en la conversación, sino en tí. Y para eso tardé un año. Después de esa salida no me volvió a hablar, y hasta la fecha no se nada de ella.

Esa fue la menos „grave“. Sí, hay otra más de mi genialidad. Resulta que era otra conocida con la que había chateado en un periodo largo de tiempo. Y bueno, ésta situación duró más, fueron 3 salidas hehehe. Misma historia, salimos, no entendí la indirecta, y terminó el intento de futura relación.

Ahora bien, unamos ambos puntos. Por un lado estoy seguro que no hay expectativas de pareja, pero por el otro lado me pregunto „¿Y si vuelvo a entender todo hasta que ya sea demasiado tarde?“. Y más importante aún „¿Estás seguro que vale la pena intentarlo? ¿Estás seguro que es una buena persona?“.

Como diría Bonnie Tyler, he vivido en un eclipse total del corazón, y ya estoy cansado de escuchar el sonido de mis lágrimas. Claro que los que somos de chocolate terminamos en el rincón de „buen amigo“. Es castrante terminar siempre en la Friend Zone. Como diría el buen lobo „She put you in the Friend Zone, put her in the Rape Zone“. Supongo que en algún momento de la vida, descubres que no son lágrimas lo que salen de los ojos, es solo que los chocolates nos derretimos.

Y sigue subiendo el carrito, y me sigo preguntando si vale la pena. No perdería en sí nada, ¿pero qué ganaría?. Dicen que cuando hay amor, las personas se aceptan como son, se quieren como son, y lo importante es estar juntas, aceptar lo que el determinismo genético, cultural, geográfico, etc les dió. Pero cuando sabes que estás mal, te piden que cambies, estás de acuerdo con el cambio, y te ofrecen su ayuda… Es preguntarse, ¿y a dónde va uno?

Sé que tengo un problema de autoestima, el cual me ha limitado infinitamente. No puedo entablar una relación social con alguien desconocido si no llevo meses o años de conocerlo o estar borracho. No puedo responder una pregunta en un salón de clases, que sé que está correcta por vergüenza a cometer un error y las burlas (que sabemos en la universidad a nadie le importa) aún sabiendo que estoy 100% correcto. No puedo entablar una relación amorosa por temor al declive de esta, por el razonamiento social de „no vaya a hacer algo que me avergüence y como no tengo control sobre los demás, prefiero evitarlo“, por la vergüenza de estar errado, y al intentarlo digan cosas como „Es que tengo problemas y no puedo“ o „Es que no te conozco lo suficiente“ o peor „Eres muy tierno, pero no eres mi tipo y no te quiero lastimar“. Siempre todos preocupándose por uno… ¿Menos uno? que es bruto e intenta una relación.

Entonces solo nos queda sentarnos a pensar y decidir, qué es lo que queremos de la vida:
– ¿Lo vale? No lo creo
– ¿Estoy dispuesto a lo que implica el título? Lo estoy
– ¿Lo está ella? No lo creo
– ¿Entonces por qué demontres estás escribiendo todo esto, haciéndome perder el tiempo leyendo con todos los ejemplos y situaciones? Porque no quiero, que por mi estupidez, entienda las cosas mal de nuevo y sea un fracaso más en el listado de las relaciones amorosas fallidas.

Supongo que no existe otra forma más que darle tiempo al tiempo, ver como se desarrolla la situación, esperar al próximo año, tan lleno de tantos planes, y ver que sucede de aquí a que llego a la cima de la montaña rusa. Jugaremos en ésta, o apagarán el parque de diversiones antes de siquiera comenzar el recorrido…

Dicen que el que no arriesga no gana, ¿pero hay algo que ganar?. Es lo que pasa cuando el que piensa dice no, pero el que siente dice sí. Creí que el que piensa tenía la razón, ¿pero si es el que siente quien la tiene?

 

— Edit —

Leyendo en retrospectiva, creo que encontré la solución a mi problema. Aplicaré un „brimazo“. Al final ella se dará cuenta (no es tonta), o indirectamente lo sabrá/descubrirá/captará o simplemente se lo diré algún dia etilizado, que me gusta, que me agradaría como pareja, pero al final, yo soy yo y eso no funcionará.

Así, que al igual que con Brim, ambos sabremos lo que siento por ella, ambos sabremos lo perdido que me encuentro (perdido de rumbo, no de perdidamente enamorado, tampoco hay que exagerar), pero al final de cuentas nunca le „llegaré“, al igual que hice con Brim. Así al final, todos seremos cuates, nos llevaremos bien, y obtendré los beneficios de las mieles que escurran de sus momentos sociables conmigo.

Y como no recordar, con esa frase, este video… „Te quiero… Pero solo como amigo“

[youtube IVvxbyyKOQQ]

— Edit 2 —

Me quedé pensando y supongo que para tentar terreno, un día de estos, así de la nada aplicaré la gabyta y le diré:

„Te puedo dar un beso?“ hehehehe =)